Nos estamos acostumbrando
a compartir nuestra información privada a través de las redes sociales sin ser
totalmente conscientes de las consecuencias que esto conlleva. Si para un
adulto puede tener consecuencias indeseables, para un niño puede ser incluso
peor.
Por este motivo te traemos
10 motivos por los que no deberías subir las fotos de tus hijos a las redes
sociales:
1.- El
"morphing". Algunos impresentables se dedican a recuperar fotos de
menores en internet y, mediante un tratamiento de las imágenes (al alcance de
todos), realizan un montaje con una fotografía pornográfica. Esta nueva foto se
distribuye de nuevo por la red.
2.- Puede que la foto que
a ti te parece tan simpática en una situación comprometida, al niño le
suponga ser el foco de bromas por parte de sus amigos y compañeros.
3.- Simplemente, puede que
al niño le de vergüenza y no le guste llegar a clase y ser el centro de
atención porque hay una foto familiar que otro amigo exhibe.
4- El niño crece, y esa
foto simpática en la bañera se convierte en una tortura cuando es mayor.
5.- Cuando se publica en
las redes sociales, pierdes el control de las imágenes, pudiendo llegar a
amigos de amigos de amigos.
6.- Según la red social
en la que publiquemos, podemos perder la propiedad intelectual, por lo que
pueden ser utilizadas sin nuestro consentimiento. ¿Recuerdas haber leído las
condiciones de uso de las redes que utilizas?
7.- Los buscadores
utilizan las fotos de las redes y las muestran en sus plataformas.
8.- Si nosotros publicamos
toda la información sobre nuestros hijos ¿cómo vamos a evitar que ellos lo
hagan?
9.- Los menores son
más sensibles al ciberacoso o ciberbullying, el acoso utilizando las nuevas
tecnologías, por lo que debemos evitar información que pueda dar pistas para
llegar a nosotros por personas desconocidas. Las fotos son datos muy sensibles.
10.- Porque nuestro deber
es educar a nuestros hijos, y protegerlos, esto debería ser suficiente, para en
caso de duda, no publicar.
Nos estamos acostumbrando
a compartir nuestra información privada a través de las redes sociales sin ser
totalmente conscientes de las consecuencias que esto conlleva. Si para un
adulto puede tener consecuencias indeseables, para un niño puede ser incluso
peor.
Por este motivo te traemos
10 motivos por los que no deberías subir las fotos de tus hijos a las redes
sociales:
1.- El
"morphing". Algunos impresentables se dedican a recuperar fotos de
menores en internet y, mediante un tratamiento de las imágenes (al alcance de
todos), realizan un montaje con una fotografía pornográfica. Esta nueva foto se
distribuye de nuevo por la red.
2.- Puede que la foto que
a ti te parece tan simpática en una situación comprometida, al niño le
suponga ser el foco de bromas por parte de sus amigos y compañeros.
3.- Simplemente, puede que
al niño le de vergüenza y no le guste llegar a clase y ser el centro de
atención porque hay una foto familiar que otro amigo exhibe.
4- El niño crece, y esa
foto simpática en la bañera se convierte en una tortura cuando es mayor.
5.- Cuando se publica en
las redes sociales, pierdes el control de las imágenes, pudiendo llegar a
amigos de amigos de amigos.
6.- Según la red social
en la que publiquemos, podemos perder la propiedad intelectual, por lo que
pueden ser utilizadas sin nuestro consentimiento. ¿Recuerdas haber leído las
condiciones de uso de las redes que utilizas?
7.- Los buscadores
utilizan las fotos de las redes y las muestran en sus plataformas.
8.- Si nosotros publicamos
toda la información sobre nuestros hijos ¿cómo vamos a evitar que ellos lo
hagan?
9.- Los menores son
más sensibles al ciberacoso o ciberbullying, el acoso utilizando las nuevas
tecnologías, por lo que debemos evitar información que pueda dar pistas para
llegar a nosotros por personas desconocidas. Las fotos son datos muy sensibles.
10.- Porque nuestro deber
es educar a nuestros hijos, y protegerlos, esto debería ser suficiente, para en
caso de duda, no publicar.